29.9.07

de paso


esta mañana le abrí a alice, pensar que hace un mes la despedí en el mismo lugar, cuando me quedé parada frente al acolchonado verde de la puerta de casa y la veía irse llorando y con aitor. el tiempo pasa pero parece que no. cuando me fui de argentina me despedí de todos mis amigos y mi familia, y desde que estoy en madrid me ha tocado despedirme también de muchos. aunque todos digan que en madrid te sentís como en casa, no deja de ser una ciudad de paso, madrid no es de nadie y casi nadie se la queda. está hecha así para que sea así. la peor despedida fue la tuya, entrar en la T4 es como clavar alfileres en mi propia muñeca voodoo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

no, eh?